UN AMIGO EN EL CAMINO
Un amigo en el camino
es una plácida arboleda
para tomar breve descanso,
después de un largo sueño.
Es un exótico jardín
con exuberantes flores
sembradas en las primaveras
de humíferos afectos.
Es la esperanza noble
que se alejó con la brisa marinera
una esplendida mañana
repleta de cariños y arreboles.
Un amigo en el camino
es una maravilla existencial
cual frondosa palmera
capaz de dar generosa sombra
a un esbelto y cálido desierto.
Es un soplo de aliento salino
que despierta su ansiado peregrinar
por las desoladas playas
de los mares de plenos afectos,
es la gota de fresca agua
que calma la sed en el silencio,
cuando el caminante avanza
a conquistar el Universo.
Un amigo en el camino
es la planta generadora de energía
que alimenta al desaliento
en las turbulentas olas de tribulaciones.
Es el fuego capaz de fundir
los leñeros más sofisticados
de las nefastas intolerancias,
constituyéndose en un fuerte bastón
para soportar al anciano débil
que ayer jineteaba el brioso corcel
de hermosos sueños.
Un amigo en el camino
es el remanzo natural
donde el navegante solitario
se protege de abismales tempestades,
esperando la calma para seguir avante.
Es el ángel enviado por Dios
para inyectar consuelo
en los momentos de taima,
cual Sol para dar luz
en horas de oscuras incertidumbres.
Prof. Miguel Ángel Ortega (MAO)
03-06-2009